Ramen Casero "Levanta Muertos"

20 min
Esta receta es la solución perfecta para un día frío, para cuando quieres algo reconfortante o simplemente para cuando tienes poco tiempo pero no quieres sacrificar sabor. Vamos a tomar una base de ramen instantáneo y la vamos a elevar con pollo jugoso, vegetales frescos, un caldo potente con kion y ajo, y por supuesto, ¡un huevo con la yema perfecta para darle toda la cremosidad!

INGREDIENTES

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1
Porción

HERRAMIENTAS

  • + Olla o cacerola mediana
  • + Tabla de cortar y cuchillo
  • + Tazón hondo para servir
  • + Pinzas de cocina

INSTRUCCIONES

Paso 1:

El huevo perfecto. Para ese huevo de yema suave y cremosa, pon a hervir agua en una olla pequeña. Cuando esté hirviendo, introduce con cuidado uno de los huevos y cocínalo por exactamente 7 minutos. Retíralo y pásalo inmediatamente a un bol con agua helada para cortar la cocción. Resérvalo.

Paso 2:

La base de sabor. En la olla donde harás el ramen, calienta el aceite a fuego medio. Sofríe el ajo y el kion picados por un minuto, hasta que sientas ese aroma increíble que perfuma toda la cocina.

Paso 3:

El caldo poderoso. Vierte el caldo de pollo a la olla y llévalo a un hervor suave. Añade el sillao y el jugo de limón para darle ese toque de acidez y sabor umami.

Paso 4:

Cocinar los tropezones. Agrega las láminas de pollo y los arbolitos de brócoli al caldo caliente. Cocina por unos 3-4 minutos, hasta que el pollo esté cocido y el brócoli tierno pero aún crujiente.

Paso 5:

El momento del ramen. Es hora de añadir los fideos ramen y el sobrecito de sazonador que viene en el paquete. Al mismo tiempo, casca el segundo huevo y déjalo caer con cuidado en el caldo para pocharlo a tu gusto (unos 3-4 minutos para una yema líquida).

Paso 6:

Emplatar como un maestro. Con unas pinzas, sirve los fideos en un tazón hondo. Acomoda con arte las láminas de pollo, el brócoli y el huevo pochado. Vierte el caldo caliente sobre todo.

Paso 7:

El toque final. Pela con cuidado el huevo que cociste al principio, córtalo por la mitad (¡mira esa yema!) y colócalo en el tazón. Espolvorea abundantemente con la cebolla china fresca y, si te gusta el picante, una pizca de hojuelas de pimiento rojo. ¡Ahora sí, a disfrutar!

TIPS

  • + Caldo es Rey: La calidad de tu ramen dependerá mucho de la calidad de tu caldo. Usar un buen caldo de huesos de pollo o de res le dará una profundidad de sabor increíble.
  • + Huevo Pochado vs. Huevo Pasado: En esta receta usamos ambas técnicas. El huevo pochado se cocina directamente en el caldo, absorbiendo su sabor. El huevo pasado (o soft-boiled) se cocina aparte en agua para lograr esa yema perfectamente cremosa y de color intenso, un clásico del ramen.
  • + Toque Chifa: Para un sabor más cercano a nuestro querido chifa, puedes añadir al caldo un chorrito de aceite de sésamo (ajonjolí) justo al final y unas gotas de salsa de ostión. ¡Queda espectacular!
  • + Varía tus vegetales: No te limites al brócoli. El ramen es muy versátil. Prueba añadirle champiñones, maíz dulce, pak choi (col china) o brotes de soya.